El Papa León XIII. ha escrito una oración para la consagración de la raza humana.

martes 1 de noviembre de 2011

El Papa León XIII. ha escrito una oración para la consagración de la raza humana.

El Papa León XIII. ha escrito una oración para la consagración de la raza humana.

También incluye un lugar para la conversión de los incrédulos. La siguiente sección fue bajo el pontificado de Juan XXIII. eliminado:


"Sé Tú el Rey de los que aún están abrazados por la vieja ilusión del paganismo o el Islam, sino que arrebatar la oscuridad y traerlos a la luz, y finalmente el reino de Dios mira con misericordia a los hijos de la gente que había sido el elegido .. Que la sangre que se ha invocado una vez en ella, como el flujo del baño de salvación y de vida en ellos también. "

Consagración de la raza humana

( Papa León XIII .)

Queridísimo Jesús, el Redentor de la raza humana, mira hacia abajo sobre nosotros! Humildemente de rodillas aquí, delante de su altar. Somos tu, tu, nosotros queremos ser. Sin embargo, cada vez más íntimamente conectado con lo que, por lo que ahora se dedica cada uno de nosotros con gozo tu corazón sagrado.

Muchos de ustedes nunca han reconocido, muchos rechazan la oferta, que rechazan. Ten misericordia de todos ellos, Jesús, más amable, y sacar todos los de su Corazón Sagrado.

Seas, oh Señor, el rey no sólo sobre los fieles que nunca te han dejado, también se trata de los hijos pródigos que te han dejado. Haz que vuelvan pronto a casa de su padre y no pasar de la pobreza y el hambre base. Sé también sobre el rey, que pueden ser engañados por falsas doctrinas o que estén separados por divisiones de usted. Piden que el lugar seguro de la verdad y la unidad en la fe de nuevo, por lo que habrá un rebaño y un solo pastor pronto.

Ser Rey de los que aún están abrazados por la vieja ilusión del paganismo o el Islam, sino que arrebatar la oscuridad y llevarlos a la luz y el reino de Dios. Finalmente mira con misericordia a los hijos de la gente que había sido el elegido. Que la sangre que se ha invocado una vez en ella, como el flujo del baño de salvación y de vida en ellos también.

Alquiler, Señor, tu iglesia, el bienestar, la seguridad y la libertad; conceder a todos los pueblos la paz y el orden. Haz que el cambio de un extremo de la tierra a la reputación de una resonancia: ¡Alabado sea el corazón divino, a través del cual llegamos a ser la salvación para él sea la gloria y el honor para siempre. Amén.